Desde aquí te mando un fuerte abrazo para que te transmitan palabras de ÁNIMO y de FUERZA. cederte mi apoyo, y extenderte mis brazos desde la lejanía, para abrazarte, a través de estas líneas, de corazón, para que sean una corriente de aire fresco en momentos tan delicados.
sabes que aquí tienes una amiga para desahogar y consolar, un hombro donde apoyar tu cabeza,
que sepas que siempre habrá un ¨te quiero¨, siempre estaré ahí y que sepas que nuestra amistad, ya desde hace muchísimos tiempo, duplica las alegrías y divide las angustias por la mitad.
temo que al pronunciar alguna palabra de aliento, no sea la adecuada o resulte vacía e inútil, cuando pienso que a veces lo importante y fundamental es callar y simple y llanamente, acompañarte, (pero me es imposible) sin malgastar ninguna palabra que no se sienta completamente, teniendo muy en cuenta que en realidad solo Dios sabe consolar,